Hablemos de estrés
El estrés es una respuesta natural que da nuestro cuerpo ante situaciones que percibe como desafiantes o amenazantes. Se activa en todos los casos como un mecanismo de defensa que prepara al cuerpo para enfrentar el peligro, una respuesta conocida como «lucha o huida». Esto sin embargo, cuando se mantiene a lo largo del tiempo y se vuelve crónico, deja de ser útil y comienza a tener un impacto negativo en la salud.
En el ámbito de las ciencias económicas, el estrés puede originarse por diversas causas: cargas de trabajo excesivas, la presión por cumplir con los plazos y vencimientos, las demandas de los clientes, la necesidad de tomar decisiones importantes bajo incertidumbre y la competencia en el mercado laboral.
Los síntomas del estrés pueden incluir fatiga, dolores de cabeza, problemas digestivos, insomnio, irritabilidad y dificultades de concentración, entre otros.
Y la ansiedad ¿Es una emoción?
La ansiedad si es una respuesta emocional que surge en reacción a ese estrés que acabo de describir, caracterizada por un estado de preocupación excesiva y constante. Aunque cierta ansiedad es normal y puede incluso ser motivada, cuando se vuelve persistente y desproporcionada en relación a las circunstancias, puede afectar de manera importante la calidad de vida y el rendimiento laboral.
Los profesionales en ciencias económicas a menudo se enfrentan a situaciones que pueden desencadenar ansiedad, como la responsabilidad de tomar decisiones financieras de alto impacto, la necesidad de prevenir tendencias económicas y la incertidumbre constante en relación a las disposiciones de los organismos de recaudación y control. Esta puede manifestarse en síntomas como palpitaciones, sudoración, temblores y en síntomas psicológicos como inquietud, miedo irracional y dificultad para concentrarse.
Efectos del estrés y la ansiedad
Tanto el estrés crónico como la ansiedad no regulada pueden tener un impacto significativo en la carrera de un profesional. Afectan la capacidad de tomar decisiones claras y objetivas, aumentan la propensión a cometer errores y disminuyen la productividad. Además, el estrés prolongado puede llevar al agotamiento profesional, conocido como burnout, que se caracteriza por un estado de agotamiento físico y emocional que reduce la capacidad de realizar tareas de manera efectiva.
A nivel interpersonal, la ansiedad y el estrés también pueden afectar la forma en que los profesionales se relacionan con sus colegas y clientes. Un ambiente laboral en el que el estrés no se maneja adecuadamente (Distres) puede volverse tenso, afectar la colaboración y dañar la cohesión del equipo. Los líderes y gerentes, en particular, deben ser conscientes de estos efectos, ya que su comportamiento y manejo del estrés pueden influir en el clima laboral.
Estrategias para regular el estrés y la ansiedad
- Reconocimiento y aceptación
El primer paso para regular el estrés y la ansiedad es reconocer su presencia. Muchas veces, los profesionales tienden a ignorar o minimizar sus emociones, lo que lleva a una acumulación de tensión. Aceptar que el estrés es parte de la vida laboral y que se puede gestionar de manera proactiva es fundamental para comenzar el proceso de regulación.
- Técnicas de relajación y mindfulness
Las técnicas de relajación, como la respiración profunda y la meditación, ayudan a reducir la respuesta al estrés. La práctica del mindfulness o atención plena es especialmente efectiva, ya que entrena a la mente para mantenerse en el momento presente y reducir los pensamientos repetitivos y ansiosos. Practicar mindfulness durante unos minutos al día puede mejorar la concentración, la calma y la capacidad de tomar decisiones.
- Organización y gestión
Una fuente importante de estrés para los profesionales en ciencias económicas es la carga de trabajo y las fechas límite. La gestión del tiempo y la priorización de tareas pueden ayudar a reducir este tipo de estrés. Utilizar herramientas de organización, como listas de tareas y agendas, permite distribuir el trabajo de manera más equilibrada y evitar el sentimiento.
- Ejercicio y alimentación sana
El ejercicio regular es una de las formas más efectivas de reducir el estrés y la ansiedad. La actividad física libera endorfinas, sustancias químicas en el cerebro que mejoran el estado de ánimo y aumentan la sensación de bienestar. Además, mantener un estilo de vida saludable, que incluya una dieta equilibrada y un sueño adecuado, contribuya a fortalecer la resiliencia frente al estrés.
- Equilibrio entre la vida laboral y personal
El equilibrio entre la vida laboral y personal es esencial para regular el estrés. Los profesionales en ciencias económicas, a menudo atrapados en una cultura de alta demanda, deben aprender a establecer límites claros y proteger su tiempo de descanso. Esto incluye apagar las notificaciones fuera del horario laboral y aprender a decir «no» a compromisos adicionales, y por sobre todo no trabajar los sábados por la tarde, domingos y feriados.
- Gimnasio emocional y coaching
Hablar sobre lo que uno siente y compartir experiencias con colegas o seres queridos puede ser un alivio significativo para el estrés y la ansiedad. Participar en grupos de discusión o buscar el apoyo de un mentor permite obtener nuevas perspectivas sobre cómo manejar situaciones difíciles. Además, no se debe dudar en buscar ayuda profesional si el estrés y la ansiedad se vuelven inmanejables. Psicólogos y coaches especializados pueden proporcionar herramientas adicionales para la gestión
Y las organizaciones ¿Que rol cumplen?
Las empresas y organizaciones en las que trabajan los profesionales de las ciencias económicas también tienen un papel crucial en la promoción del bienestar emocional. Las políticas que fomentan un equilibrio saludable entre la vida laboral y personal, como horarios de trabajo flexibles, home office, días de descanso adicionales y programas de bienestar, pueden marcar una gran diferencia en la manera en que los empleados manejan el estrés.
Además, la capacitación en habilidades de inteligencia emocional y la creación de un entorno de trabajo que valore el bienestar y la salud mental pueden mejorar significativamente la cultura organizacional. Los líderes que demuestran empatía y apoyan a sus equipos en la gestión del estrés ayudan a reducir la ansiedad y fomentan un ambiente de colaboración y cooperación logrando climas resonantes de trabajo.
A modo de cierre
El estrés y la ansiedad son desafíos reales para los profesionales en ciencias económicas, pero pueden ser gestionados exitosamente con un enfoque consciente y proactivo.
Reconocer su presencia, adoptar técnicas de regulación emocional y promover un equilibrio entre la vida laboral y personal son pasos esenciales para proteger el bienestar y maximizar la efectividad en el trabajo. Las organizaciones también deben comprometerse a crear ambientes que fomenten el bienestar y la resiliencia, comprendiendo que el éxito y la productividad dependen en todos los casos de colaboradores y profesionales saludables y estables emocionalmente.